
Esta mañana soleada del 1º domingo de noviembre, no podía ser mejor aprovechada que para visitar la magnífica exposición sobre Renoir. A las 9 h. ya había una gran afluencia de público. Media hora es suficiente para ver esas pinturas que no han sido expuestas conjuntamente en España hasta este momento.
Las 31 obras de Pierre-Auguste Renoir que el coleccionista estadounidense Robert Sterling Clark atesoró a lo largo de cuarenta años y que ahora pertenecen a los fondos del Sterling & Francine Clark Art Institute de Williamstown se muestran hasta febrero en el Museo del Prado en el marco de la primera monográfica española de uno de los más celebrados adalides del Impresionismo francés. Hay que recordar además que el arte del de Limoges apenas se encuentra representado en nuestro país, sólo el Thyssen-Bornemisza guarda alguna de sus piezas.
Es la primera vez que estas obras se exhiben de manera conjunta fuera del Clark Institute. Se trata de pinturas fechadas entre 1874 y 1900 y ligadas a los principales géneros artísticos que Renoir cultivó: el retrato, el desnudo, la figura femenina, la naturaleza muerta, el paisaje y las flores. Todas ellas dan testimonio tanto de la influencia de la tradición pictórica anterior en el artista como de sus amplias aportaciones a la creación contemporánea.
Entre las creaciones de Renoir que se pueden admirar en el Prado figuran un Autorretrato de 1875 que se aleja de la habitual delicadeza del impresionista.
Las 31 obras de Pierre-Auguste Renoir que el coleccionista estadounidense Robert Sterling Clark atesoró a lo largo de cuarenta años y que ahora pertenecen a los fondos del Sterling & Francine Clark Art Institute de Williamstown se muestran hasta febrero en el Museo del Prado en el marco de la primera monográfica española de uno de los más celebrados adalides del Impresionismo francés. Hay que recordar además que el arte del de Limoges apenas se encuentra representado en nuestro país, sólo el Thyssen-Bornemisza guarda alguna de sus piezas.
Es la primera vez que estas obras se exhiben de manera conjunta fuera del Clark Institute. Se trata de pinturas fechadas entre 1874 y 1900 y ligadas a los principales géneros artísticos que Renoir cultivó: el retrato, el desnudo, la figura femenina, la naturaleza muerta, el paisaje y las flores. Todas ellas dan testimonio tanto de la influencia de la tradición pictórica anterior en el artista como de sus amplias aportaciones a la creación contemporánea.
Entre las creaciones de Renoir que se pueden admirar en el Prado figuran un Autorretrato de 1875 que se aleja de la habitual delicadeza del impresionista.
Las 10 obras más significativas son:
1- Retrato de Madame Monet (1874)
2- Père Fournaise (1875)
3- La barca-lavadero de Bas-Meudon (1874)
4- Autorretrato (1875)
5 El puente de Chatou (1875)
6- Palco en el teatro (1880)
7- Cebollas (1881)
8- Peonías (1880)
9- Bañista rubia (1881)
10- Bañista peinándose (1885)
Paseo del Prado, s/n
28014 Madrid
Del 19 de octubre de 2010 al 6 de febrero de 2011
De martes a domingo, de 09:00 a 20:00 horas