Tocó el despertador a las 4 de la mañana y en 15 minutos ya estábamos esperando al chofer para que nos llevara por los valles de la Capadocia a disfrutar de una experiencia nueva. Según pasan los minutos se perfila la llegada del día y poco a poco la claridad se hace más presente a través del paisaje escarpado.
Tras un desayuno continental en los boxes, se distribuyen los grupos con el guía correspondiente.
Son las 5 de la mañana y los globos se van inflando, son muy grandes, pero en pocos minutos el campo se ve invadido de coloridos flotantes que uno tras otro se ponen en alza. Unos suben con rapidez y otros con más calma, un promedio de 75 ese día.
La mañana se presenta fresca, sin viento; el amanecer está llegando.
Estaban muy separados los escalones de subida, por lo que dos guapos mozos nos subieron a la cesta a las 8 españolas que nos atrevimos a volar. Aparecieron otros turistas vietnamitas y nos acompañaron. Total 24pasajeros en la cesta.
Llegó él, Sancho, nuestro piloto. Una gran sorpresa: español, guapo y de ojos azules como el cielo, simpático, gran profesional y con miles de horas de vuelo.
Tras un desayuno continental en los boxes, se distribuyen los grupos con el guía correspondiente.
Son las 5 de la mañana y los globos se van inflando, son muy grandes, pero en pocos minutos el campo se ve invadido de coloridos flotantes que uno tras otro se ponen en alza. Unos suben con rapidez y otros con más calma, un promedio de 75 ese día.
La mañana se presenta fresca, sin viento; el amanecer está llegando.
Estaban muy separados los escalones de subida, por lo que dos guapos mozos nos subieron a la cesta a las 8 españolas que nos atrevimos a volar. Aparecieron otros turistas vietnamitas y nos acompañaron. Total 24pasajeros en la cesta.
Llegó él, Sancho, nuestro piloto. Una gran sorpresa: español, guapo y de ojos azules como el cielo, simpático, gran profesional y con miles de horas de vuelo.
Así es fácil volar y disfrutar de maravillosas vistas, como el Valle de Göreme por donde hacía pasar el globo a 1-2 metros por encima de las chimeneas de las hadas, el valle rojo, etc. Con su amabilidad, Sancho, nos explicaba las características del lugar y las vistas que a lo lejos se contemplaban, como la ciudad y fortaleza de Uchisar.
Fue una hora llena de bellas e impresionantes imágenes, de sensaciones
inolvidables, de sentimientos sublimes, me parecía estar flotando por
encima de un mundo nuevo y misterioso. Para mí, después de la
maravillosa experiencia de la maternidad, ha sido la segunda más
impresionante de mi vida.
Es una sorpresa el aterrizaje; nunca se sabe dóde irá a parar el globo de aire caliente, por lo que cuando llega el momento del descenso, ya están los equipos preparados para intervenir; es una sorpresa permanente pero ni una gota de miedo, no necesitamos agacharnos como medida de seguridad, ya que no hizo nada de aire, todo perfecto.
Brindamos con champán nuestra vuelta a la tierra, recogimos nuestras fotos y el diploma acreditativo; todos contentos y disfrutando del momento. Sancho nos acompañó hasta nuestra marcha en el vehículo que nos llevó de vuelta al hotel.
Es una sorpresa el aterrizaje; nunca se sabe dóde irá a parar el globo de aire caliente, por lo que cuando llega el momento del descenso, ya están los equipos preparados para intervenir; es una sorpresa permanente pero ni una gota de miedo, no necesitamos agacharnos como medida de seguridad, ya que no hizo nada de aire, todo perfecto.
Brindamos con champán nuestra vuelta a la tierra, recogimos nuestras fotos y el diploma acreditativo; todos contentos y disfrutando del momento. Sancho nos acompañó hasta nuestra marcha en el vehículo que nos llevó de vuelta al hotel.
Agradezco de corazón la maravillosa travesía pilotada por Sancho
González Green, quien a sus 8 años ya subió él solito a un dirigible;
ha recorrido en globo nuestro país y otros lugares como : Djenner,
Nigeria, País Dogon, Senegal, Luxor... Lleva 3 años pilotando en La
Capadocia, anteriormente lo hizo en Egipto y en Nigeria. Es hijo de
Jesús González Green, reportero-corresponsal de guerra, escritor y que
junto con Tomás Feliu Rius fueron los primeros en cruzar el Atlántico en
globo de este a oeste, en 1992 a bordo del globo Rozier Am-7 "Ciudad de
Huelva".
Durante el verano no podré entrar en vuestros blogs y posiblemente no pueda publicar en el mío.
Nos encontraremos en septiembre.
Besos y feliz verano a todos.
Yo paseando por el Norte y tu te marcas esta chulada de viaje. Conozco Capadocia pero andando y en bus. Lo del globo me da miedo. Me alegro que disfrutaras.
ResponderEliminarEstoy entrando a ratitos a los blogs preparando la vuelta. Aquí estaremos esperándote. Me espera un verano movidito pero de deberes:-)
Bss y feliz verano
Pues seguro que tu paseo por el norte también habrá sido estupendo.
EliminarYo estoy aún en las nubes.
Te deseo un buen verano. A ver si en septiembre nos vemos.
Besitos
Maravillosa experiencia la que has vivido y que recordarás toda tu vida. Me alegro mucho de que lo hayas hecho, mami!!
ResponderEliminarQue pases un buen verano y que nos veamos pronto!
Te quiere,
Gracias, hijita.
EliminarComo ya te he dicho es algo que no olvidaré nunca.
Feliz día 26.
Besos de mamá
Maravilloso, Candi, maravilloso. Para mí la Capadocia es un lugar idílico como lo es el Aerópago, el Olimpo y cada uno de los lugares de la vieja cuna de la cultura mediterránea. ¡Montar en globo! ¡Ver con vista de pájaro! ¡Qué envidia!
ResponderEliminarBesos
Claro que fue maravilloso, Paco. Ya sabes que esos viajes te llenan de grandes vivencias y no se olvidan nunca.
EliminarBesos
Qué bien te lo montas, Candi. A mí también me diste envidia, nosotros por aquí abajo y tú por allá arriba :))
ResponderEliminarBesos y qué disfrutes del verano.
P.D.:...sí, sí...pero como el azul del Reford ninguno, ¿eh?
Qué valiente es esta chica!!! Genial la experiencia que nos cuentas... Sobre esos paisajes lunares únicos. Enhorabuena ...
ResponderEliminarBuen verano
Besos
¡Alucinante! La vista y la experiencia de subir en globo...y con un guía tan simpático...me alegro mucho por tí.
ResponderEliminarUn abrazo
Llego tarde, pero nunca es así si la dicha es buena. El pasado año no pude acompañar a mi grupo en el viaje a Turquía y Capadocia. Una pena, pero todo no se puede. Feliz verano y hasta septiembre. Un saludo desde mi mejana
ResponderEliminarBonita experiencia Candi. Disfruta del verano y nos vemos a la vuelta.
ResponderEliminarTe dejo un fortísimo abrazo