El fin de semana pasado visité Toledo y pude descubrir lugares extraordinarios que no figuran en las guías turísticas. Hay unos guías oficiales que muestran un Toledo más intimista e histórico que el de siempre.
Uno de esos monumentos menos conocidos y más interesantes que he disfrutado es éste "El Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda" que está ubicado en la Iglesia de San Román.
Este Museo es uno de los más importantes del conjunto monumental de Toledo. Fue inaugurado en 1969.
A pesar de su enorme valor no es una de las referencias principales del turismo que pasea por la ciudad. A esto hay que sumar la falta de señalización -incomprensible en una ciudad como Toledo- y su ubicación en uno de los barrios de urbanismo más enrevesado del casco antiguo por lo que uno puede llegar a tener dificultades para encontrarlo aunque se vaya expresamente.
El interés del Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda hay que buscarlo no sólo en la colección de piezas expuestas sino también en el lugar donde se ubica, la iglesia mudéjar de San Román, uno de los templos medievales más interesantes de Toledo.
Se trata de un edificio que reemplazó a una mezquita musulmana en el siglo XIII y que se construyó con arreglo a la moda del momento, es decir como un edificio mudéjar de planta basilical de tres naves, con ábside central. La cabecera es lo que más sufrió transformaciones, transformándose la capilla al estilo plateresco y su cúpula es obra de Alonso de Covarrubias.
Las naves se separan mediante pilares de ladrillo con dos columnas adosadas en sus frentes que reciben los magníficos arcos de herradura. Encima de este nivel hay sendos falsos triforios con tres vanos de medio punto en cada tramo. La cubierta de las naves es de madera.
Esta mezquita, como debió ocurrir de forma generalizada, reaprovechó para su construcción capiteles romanos e hispanovisigodos anteriores.
Cuando se construye en el siglo XIII el templo cristiano, se aprovecharon dichos capiteles, cuyo conjunto es uno de los aspectos más interesantes.
En este lugar se dice que fue coronado rey Alfonso VIII. La iglesia debió de ser consagrada en 1221 por el gran arzobispo de Toledo Don Rodrigo Ximénez de Rada, el mismo que muy poco después colocaría la primera piedra de la gran catedral gótica.
El otros aspecto que llama la atención es, sin duda, el conjunto de pinturas murales que se reparten por el hastial, muro sur, los intradós de los arcos, etc. Son pinturas de tradición románica, aunque con mucha movilidad de los personajes. Mucho se suele hablar del carácter mudéjar o incluso hispano-árabe de estos frescos, pero en lo esencial pertenecen a la tradición tardorrománica y que también localizamos en numerosas iglesias mudéjares del siglo XIII del ámbito de Madrid, Ávila y Toledo (Cristo de la Luz, Valdilecha, Camarma de Esteruelas, Santorcaz, Arévalo, etc.).
Además de obispos y otros personajes, lo más destacable es la escena de la Resurrección de los muertos y una magnífica escena de Dios Padre junto a Adán y el árbol. También son muy expresivos las representaciones de ángeles.
Colecciones del Museo
Las piezas que se exponen en el museo pueden clasificarse en dos categorías: originales y reproducciones.
Dentro de las originales encontramos multitud de elementos arquitectónicos como capiteles de grandes columnas, otros más pequeños pertenecientes a maineles y canceles, frisos decorados con motivos geométricos, losas con epígrafes, etc.
También es interesante las piezas de orfebrería como broches, fíbulas, hebillas, collares, anillos y otros pequeños objetos.
En cuanto a reproducciones hay que resaltar las copias del tesoro de Guarrazar y de un sepulcro paleocristiano.
Horarios
De Martes a Sábado, de 10 a 14 y de 16 a 18:30 h.
Domingos y festivos, de 10 a 14 h.
Cerrado: lunes
Tarifas
Entrada gratuita
Tengo el gusto de conocerlo, madame. Es un placer callejear por el viejo Toledo, y cualquier excusa es buena para regresar.
ResponderEliminarBuenas noches
Bisous
Me alegro, Madame. Hasta ahora no he encontrado a personas que lo conocieran. Usted es muy culta. La admiro.
EliminarEn dos días se ven muchos lugares, pero hay ciudad para muchos días.
Besos
Haber vivido tantos años en Madrid me ayudó a conocer bastante bien todo el patrimonio cultural de Toledo, pero confieso que esta es una de mis lagunas. Te agradezco, Candi, tan bella explicación y las imágenes que la complementa.
ResponderEliminarFrancisco: Tenemos tantas lagunas...! Pero es de lo más normal que los sitios más cercanos sean los que nos faltan por explorar.
EliminarVen cuando puedas.
Besos
Hola Candi efectivamente no viene destacado. Pero no hay nada como tener amistades nacidas en Toledo y te llevan a todos estos rincones. Me he alegrado mucho de ver tu post y de ser una de las afortunadas que si la han visto:-) Y ahora he disfrutado de tu espléndida reseña.
ResponderEliminarBss
Katy: Ya intuía yo que tú si lo conocías. En cuestión de ciudades estás muy bien puesta y no se te pasa una. Me alegro, porque como sabes bien merece la pena visitarlo. Hay muchos más rincones que no son tan llamativos para el turismo, pero que tenemos que patear.
EliminarBesos grandotes
¡Cuánta belleza encierra Toledo! y nosotras lo tenemos a un tiro de piedra. Lo recorrí por primera vez siendo una adolescente, después con mis tres hijas, cuando ya podían enterder algo, y aún sigo acercándome, de vez en cuando, aunque tan sólo sean unas horas.
ResponderEliminarConozco El Museo de los Concilios, que has dejado relfejado en estas preciosas imágenes.
Besos y besos, mi querida Candi.
Tenemos mucha suerte de estar cerca de ciudades con un patrimonio inigualable.
EliminarA veces por la proximidad vamos un día y siempre se hace el mismo recorrido, para que lo vean los invitados y no visitamos algunos monumentos extraordinarios, como éste.
Tus hijas tienen una gran suerte. Yo voy el viernes a vistar a la mía y de allí iremos a Londres.
Besos y besos
Guarda Toledo ese misterio de la mezcla de culturas... La sinagoga que se convierte en mezquita que acaba siendo iglesia... Me encanta, Candi. Tengo que volver porque guardo bonitos recuerdos de su visita
ResponderEliminarbesos
Pues ya sabes. Desde Madrid está a dos pasos.
EliminarCada vez que voy descubro nuevos monumentos.
Tienes que trabajar menos para poder viajar más...
Besos grandes
Tengo que decir que el Museo de los Concilios es uno de los más bellos lugares que he visto, no ya de Toledo, sino del mundo. Injustamente menospreciado en los recorridos turísticos. Si hay un cielo en alguna parte no me importaría que la puerta fuera como los preciosos arcos de esa antigua iglesia.
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